follow

Layout by me
Pixels by 7th-disorder and engrampixel.

< older posts
newer posts >


Después de mi breakdown de hace dos semanas donde exploté en angustia y pena, me he sentido perdida, como atontada. Si bien antes estaba obsesionada con hacer trabajos perfectos para la universidad, últimamente me he descuidado un poco con mis entregas. No es como si mis trabajos estén malos, pero no son lo que usualmente muestro. Me equivoco en tonteras, dejo todo a última hora, me vuelo. Pucha que me vuelo a momentos.

Y me siento más feliz. Más calmada. A decir verdad ya no pienso en la universidad todo el tiempo como antes. Hoy salí con mis hermanas, comimos pizza, fuimos al mall, vitrineamos, tomé helado y un par de veces pensé en mis tareas, y dolía, me ponía ansiosa, pero al poco rato lo olvidaba y volvía a estar bien.

Carpe Diem

Creo que mi mente se está re-organizando. Está comenzando a relajar la vena. A reflexionar sobre lo que me está envenenado. A dejar de considerar hábitos dañinos como algo normal. Que pensar en la u todo el tiempo está mal. Que posponer momentos de tranquilidad y ocio para mí está mal. Que el éxito no me define como persona, sino que yo soy yo y que la gente me ama por lo que soy y no por que tan bakan soy.

Pero como toda rehabilitación hay regresiones. A veces tengo miedo de abandonar mis hábitos obsesivos. A veces me castigo cuando soy floja. A veces me da miedo volverme deficiente en mis estudios. Me da miedo a veces y no puedo controlarlo.

Soy una adicta al éxito en rehabilitación.

PD: Muchas gracias por todos los comentarios y palabras de ánimo. Son lo mejor!

Etiquetas: , ,

Probably not ok / add comment? (9)


Ha pasado mucho. Tuve un especie de recaída hace unos días (el domingo). Me sentía tan triste, desgraciada, atrapada, angustiada, infeliz, sola, tonta, inútil, impotente, que exploté en llanto y estuve como 4 horas llorando. Creo que no lo he estado haciendo bien. Es decir, he tratado de estar bien, pero creo que terminé engañándome a mi misma diciendo "estoy bien, nada me afecta, estoy tranquila", en vez de sentarme a pensar cómo realmente me sentía.

Me volví adicta a las calmantes palabras que me decía mientras trabajaba como loca para la universidad. No escuchaba a mi cuerpo decirme que me detuviera, que estaba cansada, agotada. "estás bien, nada te afecta, sigue trabajando" Y en el momento en que me detengo 5 minutos a reflexionar que en realidad no estoy bien, que estoy muerta, que aún me afectan cosas del pasado, que tengo miedo, que estoy ansiosa, que aún me obsesiona el éxito, que me siento sola y un estorbo para los demás, es cuando la anestesia pierde su efecto y pierdo el control de mis emociones que han estado reprimidas por tanto tiempo.

Lloré tanto que me faltaba el aire, sentía que me iba a desmayar, tenía mucho miedo, pánico. No sabía que hacer. Cuando dejaba de llorar, a los 5 minutos volvía de nuevo. No importaba cuanto tratara de calmarme, no podía. De tanto llorar quedé con los ojos hinchados hasta la noche del día siguiente.

No me doy cuenta en qué momento empiezo a reprimir mis emociones. Es como si esa inhibición estuviese arraigada a mi personalidad desde siempre, desde que era niña.

Creo que necesito volver al psicólogo.

Etiquetas: , , , ,